Científicos de España han desarrollado la fórmula del desayuno ideal, que puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y fortalecer la salud del corazón. El estudio, publicado en el Journal of Nutrition, Health and Aging, mostró que la ingesta de alimentos por la mañana debe proporcionar entre el 20 y el 30% de las calorías diarias y consistir en productos saludables que contribuyan a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.
Según los resultados de la investigación, un desayuno óptimo debe incluir proteínas, fibra, vitaminas y microelementos. Para las proteínas, los científicos recomiendan huevos, requesón o yogur griego, que son excelentes fuentes de este nutriente. También es importante consumir pan integral, avena o salvado, que ayudan a mejorar la digestión y reducir los niveles de colesterol “malo”.
Las frutas y verduras frescas proporcionan al organismo fibra, potasio y vitaminas, mientras que los frutos secos o las semillas añaden grasas saludables y microelementos. Las bebidas sin azúcar, como el té verde o el café, también se consideran una buena opción para el desayuno.
Los participantes del estudio que siguieron estas recomendaciones mostraron mejores resultados en varios indicadores. Tenían un índice de masa corporal estable y una circunferencia de cintura más pequeña. También se observaron niveles más bajos de triglicéridos, que están relacionados con el riesgo de enfermedades cardíacas, y el nivel de colesterol “bueno” (HDL) se mantuvo alto, lo que protege los vasos sanguíneos. Además, dichos participantes demostraron una mejor función renal y cardíaca.
Los científicos advierten que se deben evitar los desayunos ricos en azúcar, grasas saturadas y calorías vacías. Por ejemplo, los bollos dulces, los cereales con azúcar y los refrescos no solo no sacian al organismo de sustancias útiles, sino que también pueden provocar aumento de peso y deterioro de la salud.
Anteriormente, las noticias informaron sobre un desayuno peligroso que provoca dos tipos de cáncer.