En el programa “Sobre lo importante”, la Dra. Irina Manina, terapeuta, alergóloga e inmunóloga, explica por qué se agravan las crisis alérgicas en invierno.
“Las alergias pueden estar directamente relacionadas con virus y bacterias. El sistema inmunitario se inflama y se inicia un círculo vicioso: la infección provoca una inflamación inmunitaria, que desencadena una reacción alérgica. Actualmente, se sabe que muchos virus son capaces de producir anticuerpos antialérgicos. Por eso, el riesgo de reacciones alérgicas aumenta en invierno, cuando el contacto con virus y bacterias es mayor, especialmente entre niños en edad escolar y preescolar”, explica la Dra. Manina.
Los inmunomoduladores pueden agravar las alergias en invierno: es posible experimentar una reacción al medicamento. Además, no todos los inmunomoduladores son igualmente efectivos y beneficiosos. También pueden presentarse alergias al recubrimiento entérico de las tabletas y reacciones cruzadas con medicamentos antitérmicos y antiinflamatorios.
En invierno, también se puede experimentar la reacción al frío, que ocurre al entrar en contacto con la nieve. “Existe una prueba muy simple: tome un cubo de hielo de un centímetro por un centímetro y colóquelo sobre la piel más fina durante 7-10 minutos. En pacientes realmente sensibles, aparecerá urticaria y edema en forma de cubo en ese lugar”, dice la Dra. Manina.
Las mascotas que traen polvo en su pelaje son peligrosas para las personas alérgicas. “Los dueños de mascotas deben mantener una limpieza húmeda constante. Y cuidar de su salud. Curiosamente, una mascota joven y saludable es menos alergénica que una mascota de mayor edad. Todas las mascotas deben recibir tratamientos antiparasitarios y, por supuesto, mantener la higiene del hogar”, dice el alergólogo. Lo mejor es que los niños pequeños convivan con mascotas para que se vacunen de forma natural.
Las alergias asociadas con la temporada de ácaros del polvo, que suele ocurrir al final del otoño y principios del invierno, empeoran durante el invierno. “Cerramos las ventanas, no ventilamos y sacamos la ropa de invierno del armario, que ya contiene ácaros del polvo”, advierte el alergólogo.
Las siguientes fuentes se utilizaron en la preparación de este artículo:
“Sobre lo importante”