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Grado 4 de obesidad: ¿Cuántos kilos hay que “subir” y cómo combatirla?

  • Qué es
  • Etiología
  • Síntomas
  • Se otorga discapacidad
  • Tratamiento
  • Limitaciones
  • Características del trastorno en la infancia

La obesidad de cuarto grado es la etapa más peligrosa del sobrepeso. Lamentablemente, no es muy frecuente por la sencilla razón de que en las fases anteriores el funcionamiento de los órganos internos ya sufre cambios negativos muy graves, a menudo mortales.

En nuestro breve resumen, te explicamos los riesgos de la obesidad de cuarto grado, cómo tratar la enfermedad, perder peso y recuperar la calidad de vida.

¿Qué es?

Uno de los principales indicadores del grado de obesidad en una persona es el índice de masa corporal (IMC), que es la relación entre el peso y el cuadrado de la altura en metros.

Ejemplo: estatura: 1,75 m, peso: 70 kg. En este caso, el IMC es igual a 70 / 1,75*1,75 = 22,8

¡Con un tope máximo normal de 26 unidades, en las personas que padecen obesidad de cuarto grado, este indicador supera las 40! En valores absolutos, el peso corporal de estas personas es más del doble de lo normal, y la causa es el exceso de grasa.

Etiología

Las principales causas de la obesidad que puede llegar hasta cuarto grado son:

  • adicción excesiva a la comida
  • estilo de vida sedentario
  • ciertos tipos de enfermedades infecciosas y crónicas
  • trastornos congénitos o adquiridos del sistema nervioso central
  • enfermedades y lesiones del sistema endocrino
  • desequilibrios hormonales
  • predisposición hereditaria

Síntomas

Visualmente, estas personas parecen extremadamente obesas, les cuesta moverse y, a menudo, ni siquiera pueden salir de casa. Todo esto es consecuencia del estado patológico de los órganos internos, que padecen, en particular, los siguientes cambios:

  • El crecimiento del tejido adiposo alrededor del músculo cardíaco reduce el acceso al oxígeno, lo que provoca hipoxia en los tejidos del miocardio y obliga al corazón a trabajar en exceso
  • los cambios bruscos en la presión arterial se vuelven frecuentes
  • los problemas en el sistema cardiovascular tienen un impacto negativo en el sistema respiratorio: debido a la dificultad de ventilación de los pulmones, se producen procesos inflamatorios que provocan neumonía, bronquitis e incluso tuberculosis
  • la carga excesiva sobre el sistema musculoesquelético afecta la columna vertebral y las articulaciones. Casi todas las personas con obesidad de cuarto grado sufren osteocondrosis, y muchas sufren fracturas periódicas
  • los síntomas frecuentes del trastorno son la disminución de la libido y la disfunción sexual, que puede llegar a la impotencia y la infertilidad
  • los desequilibrios hormonales, que son tanto causa como consecuencia del último grado de obesidad, provocan enfermedades endocrinas graves, como la diabetes mellitus, los tumores de las glándulas suprarrenales, etc.
  • el trastorno también afecta terriblemente al estado psicológico del paciente: la imposibilidad de llevar una vida normal, las dificultades para formar una familia plena provocan crisis nerviosas y depresiones, que a su vez provocan el aumento de más kilos

Se otorga discapacidad

Cuando se diagnostica “obesidad de cuarto grado”, se establece como mínimo un tercer grupo de discapacidad. Sin embargo, como el sobrepeso en la gran mayoría de los casos va acompañado de problemas graves en el funcionamiento de los órganos vitales, sus víctimas suelen tener un grupo más alto.

Tratamiento

Hay que entender que el tratamiento de la obesidad de cuarto grado es una tarea muy difícil. Sólo puede resolverse mediante hospitalización, con la aplicación de medidas integrales e intervención quirúrgica.

A qué médico consultar

En primer lugar, hay que consultar a un endocrinólogo, a un dietista y a un nutricionista (especialista en nutrición terapéutica). Más tarde, después de un examen exhaustivo realizado por especialistas de otros perfiles y si no existen contraindicaciones absolutas, se le prescribirá al paciente una intervención quirúrgica, que suele ir precedida de un tratamiento conservador en el hospital.

En el periodo de preparación previo a la operación, es necesario corregir los hábitos alimenticios (dieta y régimen estrictos) y el ejercicio físico (para aumentarlo gradualmente) del paciente. Esto se hace bajo supervisión médica constante.

Método

El objetivo principal del tratamiento es suprimir el apetito del paciente y, al mismo tiempo, aumentar su gasto energético. La solución óptima es una de las siguientes intervenciones quirúrgicas:

  • Liposucción: método quirúrgico para eliminar el exceso de grasa. Aunque no es un tratamiento en sí mismo, contribuye a reducir rápidamente la masa corporal y alivia la carga sobre los órganos funcionales más importantes
  • En la gastroplastia vertical, el estómago se divide de tal manera que los alimentos sólo entran en la parte superior, más pequeña, lo que provoca una saciedad precoz y reduce la cantidad de comida ingerida
  • El banding implica la formación de una pequeña parte del estómago con una banda especial, que consiste en un manguito de silicona. El efecto es el mismo que en el caso anterior
  • Como consecuencia de la derivación gástrica, se produce un aislamiento absoluto de la pequeña parte del tracto digestivo destinada a la ingesta de alimentos
  • La medida más extrema es el método de derivación biliopancreática, en la que se extirpa por completo una parte del estómago

El uso de medicamentos en el tratamiento integral no es una indicación frecuente y se utiliza con precaución, ya que existe el riesgo de numerosos efectos secundarios. En su mayoría, se utilizan medicamentos que promueven la absorción de grasas.

Limitaciones

Toda la vida del paciente con obesidad de cuarto grado debe transcurrir en las condiciones más estrictas; sin ellas, incluso las medidas más radicales resultarán inútiles. En primer lugar, esto se refiere a la dieta.

Dieta

La restricción más importante implica seguir una dieta (nutrición terapéutica) según el siguiente principio:

  • alimentación frecuente pero medida, haciendo hincapié en alimentos proteicos bajos en calorías
  • exclusión total del menú de carnes y pescados grasos, productos de harina, dulces, bebidas carbonatadas
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