- Concepto
- Causas
- Características
- Síntomas
- Diagnóstico
- Nutrición
- Tratamiento
- Complicaciones
Según la CIE-10 (Clasificación Internacional de Enfermedades), en el código E66 se incluye la obesidad, una enfermedad grave y peligrosa ligada a alteraciones del metabolismo.
Muchos erróneamente creen que el grado 1 de la enfermedad no debe preocuparles, ya que es leve y se cura fácilmente. Pero en realidad es una señal de alerta que emite tu organismo. Viene precedido del sobrepeso y es precisamente en esta fase cuando hay que tomar medidas para no llegar a su diagnóstico.
Concepto
La obesidad de primer grado es pues una patología que se caracteriza por un exceso de peso corporal que supera la norma entre un 20 y un 30%. Según la OMS, se define atendiendo a los siguientes parámetros:
- IMC = 30 a 34,9 kg/m2;
- Circunferencia de cintura en mujeres = 80 a 88 cm;
- Circunferencia de cintura en hombres = 94 a 102 cm.
En la obesidad visceral tipo 1, la figura puede cambiar externamente de forma discreta, ya que la grasa se acumula localizada alrededor de los órganos internos. En la abdominal, comienza a aparecer la barriga de forma progresiva. En la ginoide, las primeras localizaciones donde se acumula son las caderas y glúteos.
IMC: índice de masa corporal, que se calcula mediante la fórmula: IMC = m (peso en kilogramos) / h2 (altura en metros).
Causas
La obesidad de grado 1 avanzada suele ser un trampolín para el desarrollo de la enfermedad en estadios posteriores. De ahí la importancia de saber de dónde procede.
¿Qué factores pueden llevar al incremento de peso que supone esta patología tan peligrosa y desagradable? Los médicos apuntan las siguientes circunstancias:
- Factores genéticos: actividad insuficiente o excesiva de enzimas de lipogénesis y lipólisis;
- Alteraciones de la conducta alimentaria de tipo psicológico (ej. trastorno por atracón);
- Patologías del hipotálamo;
- Falta crónica de sueño, estado de estrés, crisis nerviosas frecuentes;
- Estilo de vida sedentario, que conlleva hipocinesia;
- Síndrome de Prader-Willi;
- Consumo frecuente, prolongado o descontrolado de psicofármacos, glucocorticoides sistémicos, anticonceptivos hormonales, insulina y sus estimulantes;
- Enfermedades endocrinas: hipotiroidismo, hipogonadismo, insulinoma.
Es importante señalar que todas estas causas provocan primero un ligero aumento de peso, que en sí mismo aún no es una patología (cuando el IMC se sitúa entre 25 y 29,9). Y esto brinda la oportunidad al individuo de reaccionar a tiempo: si en esta etapa se realizan las medidas necesarias, es posible evitar con muchas garantías la obesidad de primer grado.
Características
En función del sexo y la edad, la enfermedad puede manifestarse de manera diferente.
- En mujeres
El diagnóstico de obesidad de grado 1 es más frecuente en mujeres a partir de 35 años. A esta edad no solo se produce una ralentización del metabolismo, sino que además comienza la reestructuración hormonal del organismo. La proporción de andrógenos y estrógenos varía. Incluso con una alimentación normocalórica, es difícil evitar la acumulación de grasa visceral.
El diagnóstico durante el embarazo se explica por un aumento excesivo de peso gestacional. Es habitual que las futuras mamás engorden hasta 20 kg debido a los cambios hormonales que experimenta el organismo. Esta situación puede provocar el desarrollo de patologías intrauterinas en el feto.
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- En hombres
Generalmente, en el hombre, la obesidad de grado 1 se acompaña de un tipo abdominal, donde la barriga y cintura prominente dan a la figura un aspecto de manzana. Y aquí la causa principal radica precisamente en una alimentación inadecuada. Los representantes del sexo fuerte a menudo no se controlan, comen en exceso y por las noches ingieren cerveza acompañada de aperitivos calóricos.
De forma secundaria, con este tipo de alimentación se suprime la producción de testosterona, que actúa como quemagrasas en el organismo. Como consecuencia, el tejido adiposo comienza a producir estrógenos (hormonas femeninas). La consecuencia es una alteración de la función reproductiva en el hombre.
- En niños
La obesidad en niños se debe generalmente a una alimentación inadecuada (y aquí toda la culpa recae en los padres) o a un trastorno hormonal durante la adolescencia. En cuanto a la herencia o las patologías genéticas, comienzan a actuar desde el nacimiento del bebé y, a ciertas edades, la patología deriva ya en los grados 2 o 3. Las reservas de grasa se distribuyen por todo el cuerpo de manera mixta: en glúteos, abdomen y zona pectoral.
Síntomas
¿Cómo reconocer la obesidad de grado 1 antes de acudir a la consulta médica?
- IMC superior a 30, pero inferior a 34,9.
- Circunferencia de cintura: superior a 80 cm en mujeres y 94 cm en hombres.
- En el tipo abdominal, la barriga crece; en el ginoide, aumentan glúteos y caderas.
- El tamaño de las raciones se incrementa de forma progresiva, el hambre es cada vez más acusada e intensa.
- Aparecen los primeros signos de disnea, bien al subir a pie hasta tu piso o al caminar un par de paradas sin descansar.
- La figura pierde definición, el aspecto se vuelve borroso.
La enfermedad está íntimamente relacionada no solo con el peso, sino también con la altura. Si una mujer de 180 cm pesa 80 kg, se trata de una situación normal. Pero ese mismo parámetro con una estatura de 150 cm puede indicar ya el principio de la enfermedad.
Diagnóstico
En la consulta con el endocrino, para confirmar o desmentir el diagnóstico, deberás someterte a un examen, una serie de análisis y pruebas complementarias:
- Pesaje, talla, cálculo de IMC, localización exacta de las acumulaciones de grasa;
- Analítica de colesterol, glucemia, bioquímica;
- Análisis de jugo gástrico;
- Absorciometría radiológica (DEXA);
- Densitometría por ultrasonidos;
- La resonancia magnética determina la cantidad de grasa visceral.
Además de todo esto, se realiza un diagnóstico diferencial para detectar patologías concomitantes: hipotiroidismo, síndrome de ovario poliquístico, tumor de páncreas, etc.
Nutrición
Para combatir el exceso de peso, en primer lugar el médico te recomendará normalizar tu alimentación. Sin esto, el tejido adiposo seguirá acumulándose en el organismo, aumentando tu peso.
Escucha los consejos de los nutricionistas:
- La dieta hipocalórica pero equilibrada nº 8 de Pevzner es la opción ideal;
- Incrementa la cantidad de fibra vegetal y fibra dietética en tu dieta;
- Come con frecuencia, unas 5 o 6 veces al día;
- Elimina de tu menú los azúcares, las grasas trans y saturadas, así como los alimentos refinados;
- Bebe mucha agua.