No theme

¿Cuáles son las causas del VPH en las mujeres?

Existen varios factores desconocidos que contribuyen a que el virus del papiloma humano (VPH) se desarrolle en las mujeres. El VPH es una infección que evoluciona con el tiempo y se manifiesta a través de brotes intermitentes de verrugas visibles en la piel y las membranas mucosas. Estas protuberancias pueden ser cancerosas y no cancerosas. Específicamente en las mujeres, los tipos 16 y 18 presentan un alto riesgo de desarrollar cáncer de cuello uterino.

¿Por qué ocurre el VPH en las mujeres? Causas principales resumidas

Causas de que ocurra el VPH en las mujeres

La ciencia médica ha identificado cerca de 170 cepas del virus del papiloma humano. El tipo de virus influye en la actividad del patógeno en los sistemas y órganos humanos. En una paciente, pueden aparecer verrugas en la vagina o verrugas cutáneas en la ingle.

La principal causa de infección es el contacto íntimo con una persona portadora del virus. Después de ingresar en el organismo, el patógeno puede tardar en manifestarse, y las primeras señales pueden ser visibles solo después de varios años. Esta característica dificulta determinar la forma de contagio.

Relaciones sexuales

Este es un mecanismo común pero engañoso de transmisión del VPH. Las personas desconocen que albergan el virus en su organismo hasta que se realizan pruebas específicas. Ningún método anticonceptivo de barrera ofrece una protección del 100 % contra las verrugas. Las cremas, los parches y los anillos no previenen la infección. Los anticonceptivos hormonales y los espermicidas no interactúan con los virus.

Los condones ofrecen una protección mínima; la infección es posible si el sistema inmunitario está debilitado o si existen microtraumas e inflamaciones en la piel o las membranas mucosas.

Las mujeres pueden infectarse durante el sexo oral. La penetración del patógeno se produce durante cualquier contacto íntimo.

El sexo anal aumenta considerablemente el riesgo de contagio. La actividad sexual provoca microtraumas en la mucosa rectal, y las verrugas genitales comienzan a crecer en las paredes anales.

Transmisión durante el parto

El virus del papiloma es diagnosticado a menudo en niños pequeños. La infección se produce durante el parto, cuando el bebé transita por el canal vaginal infectado con verrugas genitales.

El cuerpo de la futura madre soporta una carga considerable, lo que provoca un debilitamiento del sistema inmunitario y la hace susceptible a diferentes enfermedades e infecciones. La infección por papiloma pudo haberse producido antes de la fecundación, pero la activación del virus puede ocurrir durante el embarazo.

Durante un reconocimiento rutinario, el médico detecta las verrugas genitales. Para confirmar el diagnóstico, se llevan a cabo exámenes adicionales que determinarán el tratamiento adecuado.

La ginecología brinda múltiples opciones para combatir las manifestaciones del VPH en mujeres de todas las edades.

La papilomatosis es una enfermedad silenciosa y engañosa. A menudo se detecta en los recién nacidos tras un parto por cesárea. Una madre infectada puede transmitir el virus al bebé durante la lactancia materna si tiene un papiloma en la piel alrededor de los pezones.

Contacto doméstico

El virus del papiloma permanece activo e infeccioso durante 3 o 4 horas en un ambiente húmedo. Su peligrosidad aumenta en el entorno doméstico.

La infección puede ingresar en el organismo femenino en determinadas circunstancias: al probarse ropa usada por una persona infectada, al secarse el rostro, las manos u otras partes del cuerpo con la misma toalla, al tocar superficies húmedas en baños públicos, saunas y piscinas. El riesgo de infección es mayor si el sistema inmunitario está debilitado y existen microfisuras en la superficie del cuerpo.

El autocontagio se produce cuando un papiloma del propio cuerpo se daña con objetos punzantes como cuchillos, agujas, hojas de afeitar u otros. La enfermedad se propaga con rapidez a través de los tejidos sanos junto con la sangre, lo que provoca la aparición de nuevas lesiones.

No todos los tipos de virus se transmiten de esta manera. Esto es característico de las cepas menos peligrosas y no cancerosas.

Otros

Los médicos no siempre consiguen explicar cómo y cuándo se contrae el VPH en las mujeres. El periodo de incubación puede durar hasta 10 años, lo que dificulta identificar la fuente de la infección. Las verrugas pueden comenzar a crecer incluso tras un simple saludo de manos si la persona infectada tiene verrugas en la mano y la otra persona tiene pequeños rasguños, padrastros o heridas. El beso es otra posible vía de transmisión. Las verrugas genitales individuales pueden aparecer en la mucosa bucal, convirtiéndose en una fuente de infección para la pareja. El virus es eliminado de inmediato si la mucosa de la persona sana no presenta lesiones y su sistema inmunitario es capaz de resistir los tipos de virus 6 y 11. En condiciones adversas, se desarrolla estomatitis por el virus del papiloma.

Prevención de la infección

La actividad del virus influye en la probabilidad de infección. Existen cepas que penetran fácilmente cualquier barrera, mientras que otras no soportan la protección inmunitaria.

Los tipos más comunes presentan el menor grado de oncogenicidad.

Para prevenir el contagio del VPH en las mujeres, se recomiendan las siguientes precauciones:

  • Mantener una buena higiene personal;
  • Consultar al médico ante la aparición de lesiones en la piel o las membranas mucosas, evitando la automedicación y los remedios caseros;
  • Cuidar el sistema inmunitario y reforzar las defensas del organismo;
  • Acudir regularmente al ginecólogo para la detección precoz de verrugas genitales en la vagina.

La aparición y el tratamiento exitoso de la papilomatosis en las mujeres no eliminan el virus de forma definitiva. Ningún método de control eficaz garantiza una curación completa. La enfermedad se vuelve inactiva, pero puede manifestarse durante toda la vida de la persona en caso de que el sistema inmunitario se debilite.

¿Es peligroso tener el virus en el cuerpo?

Un papiloma en la piel o una verruga genital en la mucosa de los órganos genitales es un síntoma desagradable de la enfermedad, pero no representa el único peligro para la salud. Todas las protuberancias son potencialmente peligrosas para el paciente. Algunos tipos presentan un alto grado de oncogenicidad y tienen una mayor probabilidad de transformarse en cáncer, mientras que otras pueden transformarse bajo la influencia de condiciones adversas.

Los papilomas de naturaleza benigna comienzan a transformarse como resultado de microtraumatismos constantes, cambios en el equilibrio hormonal del cuerpo femenino y la presencia de enfermedades metabólicas o patologías crónicas.

Las verrugas son blandas y susceptibles a los daños. Los microtraumatismos pueden provocar inflamación, hemorragia e infección secundaria.

El tratamiento oportuno y los reconocimientos regulares con un dermatólogo y un ginecólogo ayudarán a prevenir y detener la propagación del virus. En función del estado de la piel y las membranas mucosas, pueden recetarse medicamentos o la eliminación de las lesiones detectadas.

Existen múltiples vías de transmisión del virus del papiloma humano en las mujeres, pero las consecuencias del contacto con una persona infectada son siempre las mismas: la proliferación de verrugas en el organismo. Muchas personas infravaloran estas lesiones y no buscan tratamiento, lo cual es peligroso. Solo un médico puede diagnosticar con precisión la cepa del virus invasor y seleccionar las medidas de control adecuadas. La enfermedad puede afectar a grandes áreas de membranas mucosas y piel, aumentando el riesgo de desarrollar cáncer.

Fuente

Click to rate this post!
[Total: 0 Average: 0]

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Back to top button