Los estudios han demostrado que en Rusia, 1 de cada 15 personas tiene diabetes. Además de aquellos que ya padecen la enfermedad, 1 de cada 5 adultos rusos también presenta prediabetes. El 70 % corre el riesgo de que esta etapa evolucione a diabetes tipo II a lo largo de su vida y el 25 % de los pacientes pueden desarrollar diabetes en un plazo de 3 a 5 años. Además, es importante destacar que el 90 % de los pacientes con “enfermedad del azúcar” son personas que padecen diabetes tipo II.
En este sentido, los especialistas hacen sonar la alarma y, a veces, califican la rápida propagación de la enfermedad como una “epidemia no infecciosa”.
Azúcar peligroso
En la actualidad, la diabetes ya no se considera una enfermedad de las personas mayores, sino que ha “rejuvenecido” considerablemente y puede diagnosticarse incluso en niños. Entre sus causas, además del sedentarismo, el consumo excesivo de carbohidratos refinados de fácil digestión y el estado emocional, también se encuentra la predisposición genética, ya que la obesidad de los padres es uno de los factores de riesgo para que sus hijos desarrollen diabetes.
En general, los adultos deberían plantearse seriamente su salud y la de sus herederos. Los expertos han formulado un postulado: “La diabetes no es una enfermedad sino un estilo de vida”, lo que da a entender que nuestra salud depende en gran medida de nosotros mismos.
La prediabetes, o intolerancia a la glucosa, es la propensión a desarrollar diabetes en el futuro. La afección por lo general no se manifiesta clínicamente, pero se detecta mediante una prueba de tolerancia a la glucosa, cuyo resultado muestra una alteración en el nivel de azúcar en la sangre.
Se trata de un estado límite en el que el nivel de azúcar en la sangre ya supera los valores normales, pero aún no alcanza el necesario para confirmar la diabetes.
El nivel de azúcar es la cantidad de glucosa en la sangre, que depende del funcionamiento del páncreas. Las hormonas que produce ayudan a descomponer los nutrientes en el intestino. Luego, estos nutrientes pasan a la sangre y, a través de ella, a todas las células del cuerpo humano.
Para que la glucosa entre en las células, el páncreas libera insulina, una hormona, en la sangre. Si la insulina se produce de “manera alterada” o las células pierden sensibilidad hacia ella, entonces aumenta el nivel de azúcar en la sangre.
Una señal grave
La prediabetes es una señal de alarma grave. Conlleva el riesgo de convertirse en diabetes, cuyas complicaciones representan un peligro para todos los sistemas del organismo, ya que afectan a los vasos sanguíneos, tanto grandes como pequeños. En el caso del cerebro, las consecuencias pueden ser un accidente cerebrovascular; en el caso de los vasos coronarios, una cardiopatía isquémica y un infarto de miocardio; en el caso de las piernas, gangrena y amputación; en el caso de los ojos, retinopatía diabética y pérdida visual; en el caso de los riñones, nefropatía diabética y, en el caso de los nervios, neuropatía diabética. En este caso, los especialistas demostraron que las complicaciones tardías de la diabetes se producen incluso en la etapa del estado límite.
Para no engrosar las filas de los diabéticos, es necesario comenzar como mínimo con un reconocimiento médico anual en la clínica local. Esto permitirá detectar el problema, tras lo cual será necesario seguir las recomendaciones del especialista: en caso de prediabetes, equilibrar la dieta, aumentar la actividad física, controlar el peso corporal, comprobar periódicamente la concentración de glucosa en la sangre y la orina y, si la persona ya está enferma, añadir a este esquema la toma de los medicamentos necesarios.
Lo que ayuda
Actualmente, en las farmacias se pueden encontrar medicamentos adecuados tanto para las personas con intolerancia a la glucosa (prediabetes), incluso aquellas con sobrepeso y obesidad, como para los pacientes con diabetes tipo II.
Es importante que el medicamento pueda aumentar la sensibilidad de los tejidos a la insulina, cuidar el estado de los vasos sanguíneos y ayudar a mejorar la circulación sanguínea.
El medicamento original Subeta® tiene todas estas características. Ayuda a reducir el nivel de azúcar en la sangre en estados de prediabetes y diabetes tipo II como parte de una terapia integral, mejora el metabolismo de los lípidos (es decir, las grasas) y protege los vasos sanguíneos de las lesiones.
Más información en el sitio web oficial del medicamento. Se vende sin receta médica.
EXISTEN CONTRAINDICACIONES. ES NECESARIO LEER EL PROSPECTO.
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