Muchos niños, durante las vacaciones, no despegan la vista de sus dispositivos. ¿Cómo distraerlos sin recurrir a la violencia? Alexandra Gerásimova, investigadora del Laboratorio de Psicología Educativa Especial y Correccional perteneciente al Centro de Asesoramiento Psicológico para Escolares del Centro Científico Nacional de Pediatría del Ministerio de Salud de Rusia, comparte algunas recomendaciones.
Las vacaciones de Año Nuevo son un periodo idóneo para que los niños descansen y se fortalezcan. Para garantizar un descanso adecuado, es muy importante cumplir estrictamente con la rutina diaria (lo que incluye el sueño, las comidas, los distintos tipos de actividades infantiles y los paseos), garantizar una actividad física moderada al aire libre, introducir nuevas experiencias y ofrecer actividades colectivas tanto con adultos como con otros niños. A la hora de elegir actividades y la duración del descanso, es importante tener en cuenta las necesidades individuales y la edad de cada niño.
¿Cómo podemos enriquecer la rutina diaria del niño?
1. Actividades de invierno diversas (trineo, esculpir muñecos de nieve, guerras de bolas de nieve): ayudan a satisfacer la necesidad de movimiento del niño, saturan sus tejidos de oxígeno y fortalecen su inmunidad contra las infecciones propias de la estación. Además, los juegos activos al aire libre con otros niños (fútbol de invierno, carreras de relevos) fortalecen su esfera emocional y volitiva y desarrollan sus habilidades de interacción dentro de un grupo infantil.
2. Durante el día, es recomendable alternar la actividad física con la creatividad (fabricación de manualidades de Año Nuevo, como juguetes, postales, guirnaldas y adornos para el árbol de Navidad). Esto crea un ambiente festivo y estimula su imaginación.
Un niño gastó más de 250.000 rublos con el móvil de sus padres comprando juguetes.
3. Actividades colectivas diversas (clases de cocina, lectura de cuentos de Navidad, visionado de álbumes familiares, juegos de mesa) y visitas a eventos para niños (representaciones teatrales, espectáculos de Año Nuevo) ayudan a mantener la atmósfera festiva y de comprensión mutua. La planificación racional de actividades de invierno activas fortalecerá su salud, evitará el estrés psicofísico y lo enriquecerá con experiencias positivas.